Sus derrotas y sus sueños.
El sabor amargo de lo cotidiano,la sensación de tedio programada.
El resultado se conoce aunque la partida no haya comenzado. El árbitro señala el horizonte,el balón comienza a rodar y las cuchillas siguen afiladas aguardando a los elegidos.
Las derrotas,los sueños y el rumbo que jamás se debió torcer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario