Si tuvieses las manos tan largas como la lengua,la lengua tan morbosa como tus deseos,tus deseos tan sucios como tu conciencia y tu conciencia tan suave como tus mentiras;si fuese así ,tal vez,podría dejarme llevar hasta los rincones oscuros de tus caricias.
Terminada su perorata Nak se levantó del lado izquierdo de la cama y se fue de la habitación despacio,escuchando una respiración desconocida a su espalda.
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