El frío que se mete entre las paredes,la humedad anidando en las entrañas repletas de mariposas mordedoras,los adioses prefabricados,las huídas cotidianas y las mentiras que se cuentan al oido.
Las mañanas grises salpicadas con ñandúes polacos babeando ante el espectáculo de las piernas infinitas y los labios entreabiertos.
El frío de las despedidas enmarcadas en pesadillas negras.
Nak puede oir alguinos píos de pájaros y las indecencias susurradas en sus orejas,sabe que el tiempo de las sonrisas falsas ha concluído y prefiere ignorar todo eso y continuar contando esperanzas.
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