Allí dentro se estaba bien. Sintiéndose a salvo de las garras de los tratantes de sueños y de las miradas húmedas de los ñandúes polacos.
Una mirada.Silencio en su cabeza.Sin dejar de mirar,sin dejar de perderse entre aquellos labios entreabiertos.
Cerrar los ojos.No querer ir más allá de un sorbo de licor caliente y amargo.Cruce de miradas.El juego tan conocido que jamás dominó.
Abrir los ojos.Frío.Humedad.Olores densos.Dolor de cabeza.Incorporarse y saber que todavía Nak sigue siendo un eterno debutante.
Cerrar los ojos.No querer ir más allá de un sorbo de licor caliente y amargo.Cruce de miradas.El juego tan conocido que jamás dominó.
Abrir los ojos.Frío.Humedad.Olores densos.Dolor de cabeza.Incorporarse y saber que todavía Nak sigue siendo un eterno debutante.
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